LA HOJA

   Marta es una niña que juega en el parque de una gran ciudad. Hace poco que ha comenzado el otoño, las hojas de los chopos del parque tornan su color a la gama de los ocres y algunas de ellas caen al suelo. Una de ellas se deposita cerca de la niña, subida en el caballito-balancín. Marta desciende del columpio y la coje entre sus manos, cierra los ojos y algunas imágenes acuden a su mente. Imagina una rama de árbol de la que cuelgan diversas hojitas como la que tiene entre sus dedos, abre los ojos y comprueba que  sigue allí. Vuelve a cerrarlos, ahora ve como varias ramas se unen a un tronco grisáceo de árbol... Poco a poco la imaginación de la niña va componiendo un paisaje entrañable para ella. ¿Queréis  descubrir que es lo que imagina la niña?

Texto aproiado para realizar teatro de sombras.

  

LUNA VIAJERA

                           I
Mira la luna...
¡asoma tras la montaña!
Naranja y redonda,
¡qué bonita está!

Toda la noche
viajando...
¿estás cansada
de viajar?

Por la mañana,
a veces te veo,
sólo un momento,
luego vas a descansar.

Si yo te diera un mensaje,
¿lo harías llegar?
"Palabras de amor y paz,
sembradas en cada lugar."

¡Serás mi mensajera!,
luna, lunera, viajera. 

               II

¿Y por qué luna,
a veces no te veo?

¿Y por qué, a veces,
sólo un trocito?   

¿Por qué te escondes?,
¿de qué tienes miedo?

¡Es qué sólo quieres
jugar al escondite conmigo!

              III

¿Por qué cambias de color?
A veces, naranja,
otras... amarilla,
siempre brillante,
¡También negra!
oscura como la noche.

            IV 

 ¿Por qué vives tan lejos?
tan alto, tan arriba.
No puedo alcanzarte,
ni siquiera rozarte.

Si algún día, pudiera sentarme en tu compañía, todas estas preguntas, sin duda, te haría.